Centro de Documentación Publicitaria

BLOG

El origen real del Día de la Publicidad

En los próximos días en la profesión publicitaria celebraremos, un año más, nuestra festividad, el Día de la Publicidad. Internet y las páginas de las revistas del sector se inundarán de menciones a “San Publicito”, denominación que sin ser coetánea al origen de la celebración, sí que ya lleva entre nosotros también unos cuantos años.

El motivo de la festividad está más que claro. Ya saben, la historia de la Conversión de San Pablo. Se celebra el 25 de enero si bien en los últimos años nos hemos sacado de la manga celebrarlo el último viernes de este mes, sea o no sea día 25. También hay que decir que mucha festividad de la profesión pero como caiga en laborable, no hay agencia que se atreva a cerrar sus puertas ese día. Pero, ¿desde cuándo se celebra? ¿y quién la puso en marcha?

Hasta entonces, la advocación de una deidad era, como en otros sectores, habitual en la publicidad española. Mercurio, dios romano del comercio, o la diosa Nike, trompeta en mano, frecuentemente eran representados pero, todo hay que decirlo, sin una ligazón religiosa tras de sí, es decir, no había devoción alguna. Pero España, país de tradición católica y más aún en años de posguerra y dictadura, necesitaba justificarse en este sentido, de manera que se optó por San Pablo y su ya conocida conversión. Otra profesiones cercanas ya se habían adelantado. En 1923, por ejemplo, San Francisco de Sales y por mandato del Papa Pío XI, fue designado como patrón de los periodistas -y escritores-, a celebrar un día antes que el nuestro.

La instauración de la Conversión de San Pablo partió del Gremio Sindical de Agencias de Publicidad de la Provincia de Barcelona, lo que hoy es El Gremi, previa aprobación unánime de la Junta de entonces. Estamos en el año 1948, en Madrid, durante la celebración de una reunión nacional que representaban a las agencias de publicidad del país. Se trataban las ventajas que tenían las asociaciones, siempre dentro de las limitaciones de una organización en tiempos del sindicato vertical claro, que estábamos en los años más duros de la dictadura franquista. Federico Subirats de Magriñá, presidente de la asociación catalana, habló de la necesidad de tener un patrón como otros gremios, sugiriendo la figura la Conversión de San Pablo y aprobándose por unanimidad. Y así hasta hoy. Este fue su origen real.

Y acompañando este artículo, la portada de la circular que se repartía entre los asociados del Gremio Sindical de Agencias de Publicidad de la Provincia de Barcelona, cuyo original conservamos en el Centro de Documentación Publicitaria.